A falta de viagra, buenos son los testículos de cabra
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"¿Que si estoy recuperado? ¡pero que pregunta más boluda! ¡Como ni iba a estarlo, si me insertaron un testículo de cabra!"
John R. Brinkley fue un médico estadounidense que amasó una gran fortuna gracias a sus populares trasplantes de testículos de cabra a hombres que buscaban curar su impotencia, y más tarde de ovarios de cabra a mujeres con problemas de fertilidad.
Fue tal su popularidad, que casi resultó electo gobernador de Kansas en 1932.
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Fuentes
Lee, R. Alton. "The Bizarre Careers of John R. Brinkley". Ed. University Press of Kentucky. 2002. ISBN 0-8131-2232-5 Págs, 31-32 https://books.google.cl/books?id=jtXC7M45WZkC&pg=PA31